viernes, 5 de abril de 2024

 Higiene  de eliminaciones.-


Por tales me refiero a la higiene en la defecación y la propia de la micción.

Siendo el recto y la vejiga órganos que se hallan situados en regiones muy vecinas de  la próstata y vesículas seminales en el varón y del útero y ovarios en la mujer es necesario extremar la higiene  y el  buen funcinamiento de ellos para no llegar a padecer irregularidades que pueden llegar a ser peligrosas.

En las siguientes láminas podemos ver la relación topográfica de proximidad entre unos y otros órganos que hace comprometida las diversas funciones y consecuencias a veces nefastas si existiese  comunicación entre unos órganos con otros si existiese falta de higiene externa  o bien una permeabilidad interna patológica.  

                                                                    Anatomía pélvica del hombre


Existen reflejos en el funcionamiento del intestino que generalmente pasan inadvertidos. Así en el varón durante el acto de la defecación, en  el colón descendente se ejerce una fuerte presión sobre la vejiga urinaria que favorece la emisión simultánea de orina y al llegar la presión a la ampolla rectal dicho empuje se ejerce sobre la próstata, ógano que almacena secreciones ricas  en mucina , ácido cítrico, antígeno prostático(PSA),y hormonas :  Testosterona, Dihidro testosterona, Factor de crecimiento transformante (TGF-beta), sustancias que así  son eliminadas al meato urinario , del que saldrán transportadas al exterior por el último chorro opor  las últimas gotas de micción en instantes posteriores al acto de la defecación.


Anatomía pélvica de la mujer.


En la mujer el órgano oprimido en primer lugar durante la defecación es el útero y tras él también la vejiga urinaria. No existe la secreción glandular del varón,  pero la cortedad de su uretra , como salida de la vejiga urinaria, la hace más susceptible a la entrada de gérmenes externos  con el riesgo de padecer con mayor frecuencia cistitis.

La limpieza externa debe de ser con agua abundante en ambos sexos abarcando la zona anal, pues siempre queda manchada en  más o menos  por el paso de las heces. La zona genital igualmente se debe de hacer con agua periódicamente según las circunstancias o con una loción antiséptica adecuada solamente en caso de persistencia de  mal holor o de signos inflamatorios.